lunes, 1 de julio de 2013

AQUELLO QUE MENOS PENSABAS


Pensaba sobre el azar, sobre las coincidencias, sobre eso que suele llamarse "mira que casualidad", y fíjate por dónde... tropecé (leyendo un artículo) con este corto que os dejo al final.

Éste me llamó poderosamente la atención, porque podemos aplicar la "casualidad" a absolutamente todas las parcelas de nuestra vida, y muchas veces ignoramos o más bien hacemos como que ignoramos aquellas señales que la vida nos envía.
A veces porque requiere cierto grado de valentía. A veces porque requiere cierto grado de sinceridad. A veces porque requiere cierto grado de compromiso con uno mismo. A veces porque requiere algo que creemos no estamos preparados para desarrollar.
Sin embargo, y pudiendo errar... tengo un pleno convencimiento de que si algo viene a nuestra vida, es porque estamos preparados.
Área profesional, personal, familiar, sentimental....sea la que fuere, si ha llegado cuestiónate que quizá tengas  jugado un previo que te prepare para la final, ¿no crees que pueda ser? Deja espacio a la duda, y siéntelo.
Estoy segura de que muchas más cosas serían posibles si no sucumbiéramos al miedo.
La Dra. Elisabeth Kübler-Ross, conocida por su trabajo con enfermos terminales, constató que las personas   que saben que su final está cercano, todas y cada una de ellas, coinciden en un punto:
Hubieran arriesgado más, hubieran apostado más.

Y no arriesgamos más por miedo, por inseguridad, por temor a qué pudiera pasar, a que los resultados no sean los "esperados", ¿Y cuáles son los esperados? ¿Aquellos que podemos enclavar como conocidos y ante los cuales sabemos reaccionar? ¿O quizá los resultados esperados son aquellos que nos hacen generar nuevas conductas, nuevos descubrimientos de nosotros mismos, nuevas formas de solucionar una dificultad?
La mayoría de las personas buscan lo rutinario, porque saben como reaccionar ante ello.
Y sin duda, lo maravilloso del día a día es descubrir que ante una situación diferente tu cuerpo reacciona, genera adrenalina, tu mente busca soluciones y tu alma galopa junto a tu corazón. Porque vive. No sobrevive,no. Vive.

Reflexionaba....En ocasiones la vida nos regala .... nos hace regalos. Y normalmente no hacemos quizá todo el caso que merecen. A veces, la vida misma nos enseña bajo distintos disfraces los regalos que nos ha preparado a lo largo de nuestro caminar.
No siempre, es cierto, no siempre nos muestra con claridad qué regalo es para nosotros. Quizá debamos ser más atentos al día a día. Quizá debamos prestar más atención a esas pequeñas cosas que vivimos, a esos acontecimientos que denominamos fortuitos. Vivámoslos en su momento.
Casi siempre esperamos.Y cuando vemos que la vida nos los ha mostrado una y otra vez, entonces es cuando decidimos hacer algo. Y puede que incluso  lleguemos a desafiar toda acción prevista, puede que emerja esa parte que ni conocíamos de nosotros mismos.
Incluso puede pasar que cuando ya nos demos por vencidos.... la vida nos empuje disfrazada de cualquier locura a caminar hacia donde ni sabemos que podemos ir, dejándonos guiar, dejándonos empujar por la vida misma.
Eso sí, para que la vida apueste por nosotros yo opino que antes habremos puesto todo de nosotros mismos. Bueno, tal vez opines que recordarlos como meras anécdotas sea mejor opción.
Cada cual que reflexione sobre lo que su interior le susurre. Permítele hablarte. Permítete escucharle.
Y dicho sea de paso... veamos cuántos aviones y hacia dónde nos empujan esta semana :))

¡¡Feliz reflexión!! 







No hay comentarios:

Publicar un comentario