jueves, 15 de noviembre de 2012

HOY QUISIERA...




Hoy quisiera ser mar,
hoy quisiera ser esa ola que rompe dulcemente en la orilla,
hoy quisiera ser esa ola que choca impetuosamente contra la roca,
hoy quisiera ser esa ola que se pierde en la inmensidad,
hoy quisiera fundirme con el mar, ser parte de él.
El sabor salado de mis lágrimas me recuerdan 
mi esencia: el mar.
No puedo ser océano,
pero puedo perderme nadando en él.
Cuando el cansancio extremo se apodera de mi cuerpo
emerge de mi alma la unión con el mar.
Busco el agotamiento hasta el punto de sentir  
esa comunión con el agua. 
Entonces... mis brazos son parte de las olas,
mi respiración acompaña el movimiento de las mismas,
mi cuerpo se transforma,
ya no pesan los brazos, ni siento la patada...
no me importa la velocidad de mi nado, 
me importa la sensación de fusión con la naturaleza,
me gusta mirar el fondo mientras suelto el aire,
me gusta ver los peces, la poseidonia, 
esas algas que dejan su marca en mi muñeca quemando mi piel,
me gusta sentirme una con todo ello. Me siento una con todo ello.
Hoy quisiera ser mar, más no es posible.
Hoy quisiera ser esa ola que rompe dulcemente en la orilla, más no es posible.
Hoy quisiera ser esa ola que choca impetuosamente contra la roca, más no es posible.
Hoy quisiera ser esa ola que se pierde en la inmensidad, más no es posible.
Hoy quisiera fundirme con el mar,más no es posible.
Pero ser parte de él... eso sí es posible.



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